Máquinas creativas: ¿renacimiento híbrido o amenaza al derecho de autor?
- Claudia Jiménez
- hace 4 días
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Por: Claudia Jiménez
El 23 de abril pasado—Día Mundial del Derecho de Autor— dejó una paradoja sobre la mesa: celebramos la autoría justo cuando su definición se vuelve más incierta que nunca. Agentes autónomos de inteligencia artificial (IA) como Devin AI, AutoGPT y Open Interpreter ya no solo responden preguntas, sino que planifican, ejecutan y verifican tareas creativas con una mínima o nula supervisión humana. Al borrar la clásica frontera entre “herramienta” y “sujeto”, estas máquinas obligan a replantear paradigmas convencionales.
Los nuevos protagonistas
A diferencia de los modelos generativos convencionales, los agentes autónomos reciben un objetivo (“diseña un videojuego en 3D” o “escribe un ensayo con citas APA”) y autodescubren el camino para lograrlo. Paralelamente, redes como las Creative Adversarial Networks (CAN) producen cuadros que no imitan estilos: los reinventan e incluso se desvían a propósito de los patrones aprendidos, difuminando la línea legal entre homenaje e infracción. Lo presenciamos hace unos meses cuando el internet se llenó de escenas cotidianas y memes convertidos en ilustraciones al estilo Ghibli. La última actualización de ChatGPT, con generación de imágenes, permitió a cualquier usuario “ghiblificar” fotos populares o personales, replicando la estética inconfundible de Hayao Miyazaki, cofundador del estudio japonés conocido por sus películas de anime.
Tres pilares que se tambalean
Durante siglos, el concepto de autoría descansó en un trípode aparentemente inamovible: (1) la existencia de una mente humana detrás de la obra; (2) una intención creativa; y (3) un vínculo inmediato entre creador y creación. Los agentes autónomos dinamitan los tres soportes a la vez. Hoy podemos obtener una novela breve, un logo corporativo o incluso un software funcional sin conocer —ni siquiera poder señalar— a un autor humano directo. El resultado es una crisis de identidad: ¿sigue siendo válido hablar de propiedad intelectual cuando la fuente de la creación carece de personalidad jurídica?
Un mapa regulatorio lleno de vacíos
Las respuestas institucionales distan de ser uniformes. En Estados Unidos, la Oficina de Copyright se niega a registrar obras producidas “exclusivamente” por IA. Europa, con su flamante Ley de IA, exige transparencia, pero evita asignar la titularidad de esas obras. América Latina permanece prácticamente a la intemperie normativa: salvo algunas menciones aisladas en Chile y Brasil, los marcos legales no contemplan la creación autónoma. En ese silencio, las grandes plataformas tecnológicas asumen de facto la propiedad de todo lo que generan sus modelos, dejando al usuario sin reconocimiento ni beneficio económico.
Hacia la coautoría simbiótica
Numerosos juristas y filósofos —entre ellos Luciano Floridi y Josh Cowls— proponen una vía intermedia: reconocer la coautoría híbrida. El humano actuaría como orquestador, definiendo el objetivo y validando resultados; la máquina, como ejecutora técnica. Este enfoque preserva la “agencia humana significativa” y abre la puerta a licencias flexibles que distingan entre usos experimentales y comerciales.
El debate ya no es teórico: afecta contratos, negocios y hasta la identidad profesional de artistas y programadores. Si ignoramos la ola, corremos el riesgo de consolidar un monopolio creativo dominado por pocas corporaciones y una legislación obsoleta. Si actuamos ahora, podemos construir un ecosistema donde la innovación algorítmica conviva con la justicia distributiva y la responsabilidad social.
La pluma —o su equivalente digital— sigue en nuestras manos. Aprovechemos este punto de inflexión para diseñar un derecho de autor que reconozca la esencia colaborativa de la creatividad del siglo XXI, sin sacrificar la protección del talento humano que, al final, sigue siendo el origen y el propósito de toda obra.
Referencias:
Jiménez Claudia (2025, abril 24), Arena Pública https://www.arenapublica.com/opinion/claudia-jimenez/maquinas-creativas-la-revolucion-silenciosa-que-desafia-el-derecho-del-autor
Floridi, L., & Cowls, J. (2021). A Unified Framework of Five Principles for AI in Society. Harvard Data Science Review. https://hdsr.mitpress.mit.edu/pub/l0jsh9d1
Claudia es Doctora en Ciencias Políticas y Sociales, profesora del Tecnológico de Monterrey en Ética e Inteligencia artificial. Pionera de IA en aula. Chief AI Officer CPTM por Silicon Valley Certification Hub. Socio fundadora de Crea con IA. Articulista en Arena Pública sobre temas de tecnología e innovación.
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